COMUNICADO DEL DOMINGO 8 AGOSTO DE 2010

Siempre que ocurre una desgracia y los medios hacen eco de ella sentimos por un segundo o creemos sentir como se siente la familia afectada, pero al siguiente segundo seguimos con nuestras vidas. También es lógico y normal sino quizás nos volveríamos locos.

Pero la historia de Juan Antonio está sin acabar, esta historia sólo puede acabar cuando aparezca. Este drama lo vivimos cada día y todavía no perdemos la esperanza.
Los familiares y amigos seguimos luchando y vamos a seguir peleando para que no vuelva a ocurrir nada como esto a ninguna familia.
Independientemente de cómo acabe esta historia, los episodios que estamos sufriendo la familia con todo el proceso de investigación y búsqueda son bastante fuertes.

Comenzamos, por ejemplo, que la Guardia Civil no tiene la certeza de que Juan Antonio está en la sierra (a pesar de que no lleva documentación, ni apenas dinero, de que iba vestido como solía ir a la sierra con su bastón de andar).

Desde el mismo viernes que se pone la denuncia se informa que un testigo que lo conocía lo ve en el autobús de Mijas - Fuengirola y se pide a la Guardia Civil que investigue las cámaras de seguridad para poder asegurarnos de que coge el siguiente autobús Fuengirola - Marbella (y así poder confirmar la primera hipótesis de los familiares de que se disponía a subir a la sierra por la parte de Ojén). Aunque sea difícil de creer son los propios familiares, tras algunos días de espera, los que solicitan en la estación de autobuses si han visto a Juan Antonio. ¿No os parece que esto lo tenía que haber hecho la Guardia Civil? Ahí no acaba la cosa. Once días transcurridos después de la desaparición, un señor con un negocio en Fuengirola contacta con una de las hermanas del desaparecido para darles ánimo y comentarle que la Guardia Civil ha pedido las cámaras de su establecimiento. ¡A los once días!.
Pero ahí no acaba la cosa, los familiares desesperados y todo el día pensando se nos ocurre que podemos pedir las cámaras de la gasolinera de Marbella, del cruce los Morenos... evidentemente cuando contactamos, estos días están borrados. ¿No creen ustedes que esto es labor de la Guardia Civil y no de los familiares y amigos que estamos destrozados sin comer, sin dormir, con una angustia brutal? ¿No piensan ustedes que aquí se esta haciendo algo mal? ¿O es todo?

Si a mi hermano se le ha dejado de buscar porque la Guardia Civil no tiene la certeza de que esté en la sierra es porque desde el principio no han hecho su trabajo.
Este es sólo el principio del culebrón, pero como algunas reflexionan ¡Qué no me pasa a mi ni a mi familia! Porque esto de verdad que no parece un paíl del primer mundo.

PARA LA PRENSA: UNA BUENA CRÍTICA

Este fin de semana en el dispositivo de búsqueda alternativo (organizado por familiares y amigos) se incorporaban el viernes por la noche un grupo llamado S E R E M Servicio de Emergencias Rescate y Medio Ambiente, que venían desde Madrid y en teoría llegarían tarde puesto que salían al medio día.

El dispositivo (según confirman por teléfono) es de ochos personas y tres perros, dos todo terrenos y una unidad sanitaria. Se quedaron dos personas toda la noche en vela esperándolos y llamándolos hasta las 5 de la mañana sin obtener respuesta, para acomodarlos en el pabellón y enseñarles las instalaciones y zona de avituallamiento. Como si los familiares y amigos no tienen suficiente, estas personas no aparecen ni dan señales de vida por si les ha ocurrido algo.
Otro capitulo subrealista de esta historia que es la búsqueda de Juan Antonio Gómez Alarcón.

No os preocupéis que seguiré, por mi parte, contando episodios de esta pesadilla sin fin que no le deseo a nadie.

Y la prensa mucho Michel Obama a toda página que es más importante que la vida de un ser humano. ¡Para eso no reparan en helicópteros!

Carmen Gómez Alarcón